Los minoristas enfrentan una creciente presión para brindar experiencias de compra más rápidas y fáciles, y la temporada de vacaciones lo hace aún más urgente. Noviembre y diciembre, especialmente el tramo desde el Black Friday hasta Navidad, es siempre un momento crucial para los minoristas, y 2018 parece un año especialmente prometedor para los resultados finales. El crecimiento económico es el más alto desde 2005.
Los minoristas pueden sentir que estos tiempos prósperos no durarán para siempre, y están lanzando nuevos incentivos y características para esta temporada de vacaciones. Muchos de los conceptos se centran en la puntualidad y los costos de envío, dos puntos de dolor cada vez más frecuentes para los clientes. Esta temporada, espera ver...